CAPÍTULO 11 - UN DESTINO EN EL SUR CHAPTER 11 - A DESTINATION IN THE SOUTH

 

 Una vez resueltas las cuestiones del noviazgo de Paddy y Florence, y el destino de John y Margot, tocaba hacer los correspondientes preparativos, que no eran pocos, para la nueva vida que les esperaba a todos. Claire dejó, como tantas otras veces, todos los asuntos de Stampton Hills en manos del administrador, Mr. Parsley, a quien ya se le empezaban a notar los años. A pesar de su magnífica salud y buena forma física, su mente ya no era la de antes y Claire había percibido algún que otro despiste. Eso le hacía recordar inevitablemente al difunto Mr. Smith, con quien Mr. Parsley guardaba cierto parecido, y su terrible padecimiento con la enfermedad de Alzheimer. Como de costumbre, se citaron una tarde en el despacho de Stampton Hills donde tuvieron oportunidad de charlar largo y tendido. Claire quedó sorprendida al ver al otrora ágil Mr. Parsley caminando con la ayuda de un bastón. Tomaron asiento y, tras comprobar que la administración de Stampton Hills funcionaba como un reloj, Claire tomó la palabra:

─Mi querido Mr. Parsley, me alegro de que todo vaya como la seda en todos los asuntos de nuestra casa. Sin embargo, hay un asunto que me preocupa. 

─Usted dirá, mi querida Mrs. Hopkins.

─Bueno, como habrá podido comprobar, nuestras estancias aquí son muy esporádicas y, con la excepción de ésta que ya termina, suelen ser breves por lo que no tenemos mucho tiempo para examinar en primera persona cómo van todas las cosas por aquí. Por supuesto, su labor hasta ahora ha sido inmejorable y magnífica por lo que mis hijos y yo le estamos muy agradecidos, pero…

 Al decir esto, Mr. Parsley frunció el entrecejo, se ajustó las lentes y se podía ver cómo su espalda adquiría una postura cada vez más envarada mientras sujetaba su estilográfica con los pulgares y los índices sobre los libros de contabilidad.

 ─… “¿pero?” ─preguntó con cierta inquietud.

 ─Bueno, verá… ─titubeó Claire, haciendo que el nerviosismo de Mr. Parsley fuera en aumento ─en realidad igual es una tontería, pero le seré sincera, el tiempo pasa igual para todos. De la misma forma que hemos tenido que ir renovando poco a poco a muchos miembros del personal de Stampton Hills, debemos ir pensando en usted, mi querido Parsley…

Once the matters of Paddy and Florence's courtship, and the destination of John and Margot were resolved, it was time to make the necessary arrangements, which were not insignificant, for the new life that awaited them all. Claire, as she had so often done, left all matters at Stampton Hills in the hands of the manager, Mr. Parsley, who was already beginning to show his age. Despite his excellent health and physical fitness, his mind was no longer what it had been, and Claire had noticed occasional lapses in consciousness. This inevitably reminded her of the late Mr. Smith, to whom Mr. Parsley bore a certain resemblance, and his terrible bout with Alzheimer's disease. As usual, they met one afternoon at the Stampton Hills office where they had a chance to chat at length. Claire was surprised to see the once agile Mr. Parsley walking with the aid of a cane. They sat down, and after checking that the administration of Stampton Hills was running like clockwork, Claire said:

"My dear Mr. Parsley, I'm glad that everything is running smoothly in all matters at our house. However, there is one matter that worries me."

"You're right, my dear Mrs. Hopkins."

"Well, as you may have noticed, our stays here are very sporadic, and with the exception of this one that's just ending, they're usually brief, so we don't have much time to personally examine how things are going around here. Of course, your work so far has been excellent and magnificent, for which my children and I are very grateful, but..."

As he said this, Mr. Parsley frowned, adjusted his glasses, and you could see his back becoming increasingly stiff as he held his fountain pen with his thumbs and forefingers resting on the ledgers.

"…"But?" "He asked with some trepidation.

"Well, you see," Claire hesitated, making Mr. Parsley even more nervous. "Actually, maybe it's just silly, but I'll be honest, time passes the same way for everyone. Just as we've had to gradually replace many members of the Stampton Hills staff, we must keep you in mind, my dear Parsley."