UNA CORRIDA DE TOROS INVERNAL - A WINTER BULLFIGHT

 

 

 

Nunca hemos estado en una corrida de toros ¿verdad, cariño? – comentó el coronel dirigiéndose a Claire mientras tomaba un sandwich de la bandeja que le ofrecía Mrs Smith.

– Es algo que hay que ver al menos una vez en la vida, mis queridos amigos – afirmó Mr Smith – a ella – señalando a su esposa – no le gustan especialmente, lo pasa mal ante el sufrimiento del toro, pero yo lo considero algo atávico; la lucha entre el hombre y la bestia por sobrevivir; algo absolutamente grandioso. Además, es un mano a mano entre dos grandes toreros: Lagartijo Chico y Morenito de Algeciras, un torero local que ha triunfado en las mejores plazas de toda España.

– ¿Todas las consortes de los delegados van, cariño? – preguntó Claire a Hopkins.

– No lo sé, mi vida ¿Van todas, James?

– Estoy seguro de que irán todas. No es un espectáculo fácil de ver para muchas damas, pero rechazar la invitación se consideraría algo grosero, después de todo, en España, y especialmente en Andalucía, las corridas de toros son un importante acto social comparable, en cierta medida, a la ópera en Italia. Querida, en el caso de que le resulte difícil de ver, le recomiendo que haga como hace mi mujer, llévese los anteojos de la ópera y simule estar mirando al toro y al torero mientras fisgonea los tendidos de enfrente. Siempre se ve a gente conocida. Ella se lo pasa bomba.

 

We've never been to a bullfight, have we, love? – The colonel commented addressing Claire while taking a sandwich from the tray that Mrs Smith offered him. – It is something that you have to see at least once in your life, my dear friends – said Mr Smith – she – pointing to his wife – doesn't particularly like them, she has a hard time with the suffering of the bull, but I consider it something atavistic; the struggle between man and beast to survive; something absolutely great. In addition, it is a hand in hand between two great bullfighters: Lagartijo Chico and Morenito de Algeciras, a local bullfighter who has triumphed in the best bullrings throughout Spain.

 - Are all the consorts of the delegates going, darling? - Claire asked Hopkins. 

- I don't know, dear. Are they all going, James? 

- I'm sure they will all go. It is not an easy sight to see for many ladies, but turning down the invitation would be considered rude, after all, in Spain, and especially in Andalusia, bullfighting is an important social event comparable, to some extent, to the opera in Italy. My dear, in case you find it difficult to see, I recommend that you do as my wife does, take your opera binoculars and pretend to be looking at the bull and the matador while peering into the stands across the way. You can  always see familiar people. She always has great fun.